La joven pertenece al grupo indígena Shipibo-Konibo, ubicado en el distrito de Calle Río, en la provincia de Ucayali. Tiene 17 años y es una estudiante decidida. Actualmente, toma clases de inglés y habla con fluidez el idioma Shipibo-Konibo, lo que la conecta profundamente con sus raíces culturales.
Aunque no vive con sus padres, reside con su abuela, quien la ha cuidado desde pequeña. Su abuela es una talentosa artista Shipibo que se mantiene fiel a las tradiciones y costumbres de su pueblo, transmitiéndolas de generación en generación y ejerciendo una gran influencia en la vida de la joven.
La especialidad de esta estudiante es realizar aretes de mostacilla con diseños únicos y hermosos. Su habilidad artesanal refleja la riqueza cultural de su comunidad y su dedicación por preservar este arte ancestral. El sueño de esta prometedora estudiante es continuar sus estudios en Canadá y convertirse en una profesional exitosa. Su determinación y pasión por explorar nuevas oportunidades y experiencias en el mundo, sin olvidar sus raíces, la impulsan a perseguir un futuro brillante y lleno de posibilidades.
Chiara Alvarado Rodríguez es un ejemplo de perseverancia y orgullo cultural, una joven que busca abrirse camino en el mundo, llevando consigo la sabiduría y tradiciones de su pueblo Shipibo-Konibo.